Sunday, October 03, 2004

chismes de lavadero

"I chose the old-fashioned way to be new"

--Robert Frost

En mis ratos de “ociosidad” se me ocurre, de vez en cuando, revisar el periódico. Por lo regular compro El Financiero (es el más interesante). Sin embargo, este sábado (ayer) compré el Excelsior porque mi profe de Oratoria escribe en él y quería leer un artículo suyo.
Ya anteriormente había escuchado la noticia de los pleitos entre el Gobierno Federal y el del D.F. en materia de presupuesto, pero cotejando dos noticias que venían publicados en el Excélsior, me encontré, para variar, con una gran incongruencia.
Vamos por partes. Se supone que a los del D.F. nos van a quitar 9 mil millones de pesos del presupuesto para destinarlos al rubro de educación. “Alejandro Encinas, secretario de Gobierno del D.F., recordó que en la Cámara de Diputados hay un dictamen para reformar el artículo 122 Constitucional, con el que se establecerá una reducción de las participaciones federales a la administración local para destinarlos al rubro de educación, con el argumento de que todas las entidades federativas lo hacen.” (Excelsior). Según este funcionario, esto significaría un incremento considerable en los impuestos locales. Pero si bien, no estoy en contra de que haya reajustes en la manera cómo se distribuye el presupuesto, sí estoy en contra de que el gobierno tanto federal como local maneje mucho dinero y no nos diga en qué y cómo lo gasta. Hay muchas incongruencias.
Si van a “ahorrar”, o lo que es lo mismo, nos van a apretar el cinturón para invertir más en la educación (algo que se me hace f-ormidable), no entiendo la necesidad de pedir un préstamo tan fuerte a una institución bastante mezquina: 475.5 millones de DÓLARES al Banco Mundial, mejor conocido como BM. “Se canalizarán [los millones] a mejorar las condiciones educativas de la niñez hasta la secundaria; apoyar los esfuerzos en pro de una vivienda digna a las capas más necesitadas y fortalecer las instituciones de ahorro y crédito popular, sobre todo en el sector rural.” (Excélsior). Esto sólo sugiere crisis (Fox, una vez más, se contradice en los hechos) y la pretensión de hacer crecer a México con dinero ajeno es algo que varias veces ha probado ser una estupidez. Nosotros no tenemos un problema de recursos, sino de mala administración. Se desperdicia no sólo dinero sino tiempo, espacio, recursos y energías en cosas nada productivas. Si tenemos problemas con el sistema de jubilaciones no es sólo porque somos un país pobre, sino también porque los sistemas de seguridad social están pésimamente administrados; la tranza no nos deja avanzar. y lo que se dice que se hará con el préstamo del BM es tan vago como el futuro del país, y presenta varias anomalías. ¿Para qué reducirnos el presupuesto si de cualquier manera se va a pedir un préstamo? o ¿para qué pedir un préstamo si se piensan tomar medidas “efectivas” para solucionar internamente nuestros problemas? ¿A qué se refieren exactamente con mejorar “la educación de la niñez”? ¿Van a hacer más escuelas, les van a pagar más a los maestros o van a cambiar a los administrativos corruptos y flojos? ¿Si van ha destituir gente, para qué necesitan más dinero? ¿Si van a hacer más escuelas, por qué no empezar por mejorar las que ya tenemos? ¿Si van a utilizarlo, como dicen, para material didáctico y capacitación de maestros, entonces aceptan que nuestros profesores no están lo suficientemente capacitados y que hace falta “material didáctico”? ¿Qué tipo de material didáctico quieren? ¿Cómo van a lograr la capacitación de los maestros? y la principal, ¿Qué les hace pensar que la educación media superior (entiéndase bachillerato) no necesita de apoyo económico? ¿Acaso quieren que sólo se estudie hasta la secundaria? ¿Por qué nunca hablan de apoyo a las universidades públicas?
Esto sólo demuestra la incompetencia, pero de los administradores del dinero mexicano y su corta visión a futuro.

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