He aquí el inicio de no sé qué. Se parece tanto a mi vida "real" que no me agrada. Sin embargo, la necesidad de expresarse a veces nos embriaga, nos llena de energía y es un impulso que busca realizarse. Hoy estoy empezando una página y quizá mañana la abandone porque existe el peligro latente de morir, o lo que es lo mismo, olvidar. Estoy en un período (espero que corto) de confusión y me pregunto tantas cosas que a veces quisiera vivir en la inconsciencia total.
Mis silencios están llenos de interrogaciones que son demasiadas como para vaciárselas a un sólo individuo. Pero no soy la única.

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El vacío es una paradoja:
El vacío llena de vacío:
El vacío vacía vacío